Pizza vegana casera

Porque la opción vegana no tiene por qué ser aburrida.

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Porque la opción vegana no tiene por qué ser aburrida.

Cuando pensamos en platos veganos suele venirnos a la mente una ensalada sin más, un tofu bastante soso y verduras al vapor. Pero la cocina es lo que tú quieres que sea, es crear, inventar y disfrutar. Y sí, se puede hacer una pizza vegana casera que le da mil vueltas a cualquier otra que hayas podido probar.

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Ingredientes:

Paso a paso:

  1. Lo primero será precalentar el horno, con calor arriba y abajo, a 190º. Dejaremos la bandeja en la parte baja del horno, para que esté bien caliente y nuestra pizza quede crujiente al cocinarla.
  2. Mientras el horno se precalienta, vamos a cortar la cebolla en juliana, bien finita, y a laminar el calabacín ayudándonos de una mandolina o un pelador, en tiras largas y finas. Puedes añadir la verdura que te apetezca, pero la combinación de calabacín y cebolla al horno es increíble.
  3. Cogemos nuestra base de pizza, que, además de ser vegana, no tiene gluten, y le ponemos una capa generosa de tomate frito. Por encima colocamos la cebolla y el calabacín que ya tendremos cortado, y le añadimos un puñado de piñones, distribuyendo todos los ingredientes de forma uniforme por toda la base de la pizza. Nos la llevamos a la bandeja del horno que estará bien caliente sobre un papel vegetal, y horneamos durante 10 minutos en la parte media-alta.
  4. Mientras la pizza se cocina preparamos nuestro parmesano vegano: será tan fácil como añadir los anacardos, la levadura nutricional, la sal y el ajo en polvo en un mortero o procesador de alimentos y machacar todo hasta conseguir un polvo más o menos fino. Lo puedes dejar tan fino como prefieras.
  5. Cuando la pizza salga del horno, le añadimos el parmesano que hemos preparado por encima, y la tendríamos lista: la pizza vegana perfecta, sin gluten, saludable y sin renunciar al sabor.

Lo mejor de esta receta es que es apta para todos, que está riquísima y que se prepara en 15 minutos. Es perfecta para preparar con amigos y sorprender a todo el mundo, porque está claro que se puede comer vegano, saludable y sin gluten sin renunciar a tus comidas favoritas.