Los beneficios y las propiedades de los ingredientes de estos bombones de macadamia y espirulina, son un cocktail de bienestar, buena salud y felicidad interna.¿Cuáles son las propiedades de las nueces de macadamia? Reducen los niveles de colesterol gracias a las grasas monoinsaturadas. Aportan omega 3, omega 7 y omega 9, que benefician el sistema cardio circulatorio, y además, reduce los procesos de inflamación del organismo y previene las enfermedades del corazón. Por otro lado, protege la piel y lubrica el intestino, beneficiando el sistema digestivo. Contienen zinc, cobre, calcio, fósforo, potasio y magnesio.La manteca de cacao cruda, contiene altas cantidades de antioxidantes, magnesio y sustancias químicas que afectan al cerebro, como la anandamida, theobromina, serotonina, feniletilamina y triptófano con propiedades para mejorar nuestro estado de ánimo, con pensamientos creativos, atención consciente, aumento de energía y sentimientos de bienestar. Todo gracias a que las semillas de cacao no se han tostado en el prensado y molido para extraer la manteca en crudo casi a 42 grados.La espirulina, es uno de los superalimentos que tienen mas concentración de proteína, vitaminas B12, hierro, ácido gamma linoleico (GLA), ácido graso esencial (necesario para el cuidado de la piel) y clorofila (anticancerígeno). También es rico en vitaminas y minerales.Los dátiles contienen antioxidantes y son energéticos y nutritivos. A destacar, su bajo indice glucémico de 50, que evita los picos de azúcar en sangre y la producción extra de insulina, al igual que el sirope de agave, que con un IG de 30 también de bajo indice glucémico.Es fantástico poder hablar de los beneficios que aportan éste tipo de repostería, siempre y cuando tengamos el control y la moderación de su consumo.
Ingredientes para 20 unidades
- 50 gr de manteca de cacao
- 25 gr de cacao en polvo
- 25 gr de algarroba en polvo
- 100 gr de nueces de macadamia activadas
- 8 dátiles sin hueso
- 20 gr de sirope de agave
- Extracto de vainilla y zumo de limón al gusto
- 100 gr de cobertura de chocolate
- Espirulina en polvo
*En moldes para bombones
Elaboración
- Para empezar, pon al baño maría la manteca de cacao hasta conseguir un estado líquido. Reserva.
- Luego retira el agua de remojo de las nueces de macadamia, enjuaga con abundante agua y escurrir. Procesa con la picadora unos segundos hasta conseguir un tamaño de 2 milímetros de grosor y reserva 20 gramos. Añades a un par de cucharadas de espirulina en polvo en estos 20 gramos, para que se impregnen de alga y se tiñan de color verde azulado.
- Procesa todo junto (excepto la cobertura de chocolate), los 20 gramos de macadamia y la espirulina en polvo. Tritura hasta conseguir una masa homogénea y añade los 20 gramos de macadamia rebozada en espirulina a la masa (con un colador separa la espirulina sobrante del rebozado y añade solo las nueces de macadamia), mezcla bien y reparte la masa en el molde de los bombones. Pon los moldes en el congelador durante 4 horas.
- Derrite la cobertura de chocolate al baño maría y prepara una bandeja con papel vegetal para ir añadiendo los bombones con la cobertura.
Idea: si dispones de una rejilla para la cobertura de chocolate, puedes poner los bombones desmoldados y congelados encima de la rejilla y esta encima de una bandeja para recoger el chocolate que sobra. Cubre de chocolate los bombones
5. Si no tienes rejilla: introduce el bombón apoyado en un tenedor en la cobertura y deja escurrir unos segundos. Ponlo en una bandeja con papel vegetal. Aunque si notas que el chocolate se enfría y te cuesta trabajo, vuelve a poner la cobertura al baño maría. No tiene que ser muy alta la temperatura de la cobertura, para que no se derrita el bombón .
6. Cuando acabes éste proceso, refrigera durante 30 minutos los bombones antes de introducirlos en una caja. Así te asegurarás de que la cobertura se ha endurecido. Por último, espolvorea con espirulina los bombones y guárdalos en el refrigerador.
Aprende un poquito más
- Puedes aumentar las cantidades y elaborar una tarta de chocolate. En la base pones los trozos de macadamia rebozados de espirulina sobre papel vegetal y encima la masa de macadamia con el resto de ingredientes. Luego cubre con la cobertura de chocolate. Finalmente, espolvorea con la espirulina con la ayuda de un colador para distribuirla mejor. Mantenla en el refrigerador.